Peñarol venció 3-0 a Wanderers y ya puso la cabeza en la Copa Sudamericana.
Primer tiempo:
A los
20', un error de Damián Macaluso le permitió al aurinegro ponerse en
ventaja. Un pase atrás, que no aparentaba mayores complicaciones,
terminó en el 1-0.
El
zaguero se patinó en la mitad de la cancha, no llegó a rechazar la
pelota y Rodrigo Rojo se fue expreso al arco. El lateral eludió al
arquero, pero su remate se estrelló en el horizontal. Ahí apareció
Fabián Estoyanoff para conectar de cabeza y desahogar el grito en el
Campeón del Siglo.
Ventaja
merecida para un equipo aurinegro que ya esa altura era más que
Wanderers. Tenía el control del partido, no pasaba zozobra y cada vez
que pasaba el mediocampo daba la sensación que estaba cerca de
convertir.
El
"Bohemio" mostró su peor cara en los primeros 45 minutos. Un equipo sin
ideas y que mostró muy poco con la pelota a pesar de tener hombres de
buen pie en ofensiva.
Segundo tiempo:
En el
complemento, Peñarol dejó crecer a Wanderers y la visita tuvo un par de
chances como parar llegar al empate; pero Kevin Dawson siempre apareció
atento para mantener el cero.
El
equipo de Diego López se cerró atrás en el último cuarto de hora y
apostó al contragolpe. De esa manera, con Wanderers jugado al ataque,
encontró más espacios. A los 86', tras un desborde de Estoyanoff, un
rebote le quedó al "Toro" Fernández que con un potente remate liquidó el
partido.
Ya en
el cuarto minuto de descuento, el "Toro" se fue directo al arco y cuando
fue a eludir a Ignacio De Arruabarrena, el arquero lo bajó. Penal que
Estoyanoff cambió por gol y sirvió para el 3-0 final.
Así, Peñarol sumó su segundo triunfo al hilo y alcanzó los siete puntos en tres fechas del Torneo Clausura.
Ahora,
y como lo pidió la gente que se arrimó al Campeón del Siglo, la cabeza
está puesta en la Copa Sudamericana. El martes, el aurinegro se jugará
todo en el certamen continental ante Atlético Paranaense.
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